Ubicada en un entorno natural de gran privacidad, esta chacra combina el encanto del campo con la proximidad al mar y al vibrante pueblo de José Ignacio. La propiedad se desarrolla en dos plantas, con una distribución funcional y ambientes amplios que se integran armoniosamente al paisaje.
En la planta alta se encuentra el núcleo social de la casa: un luminoso living comedor con hogar a leña que invita a disfrutar de los atardeceres en un ambiente acogedor. La cocina, semi integrada, permite una dinámica cómoda entre el área social y el espacio culinario. Esta planta también cuenta con tres dormitorios y una terraza con parrillero y comedor exterior, ideal para reuniones al aire libre con vistas al entorno verde.
En planta baja se ubica un espacioso playroom con baño completo, que puede funcionar como sala de juegos, sala de estar o espacio multifuncional, junto a una cuarta habitación que brinda mayor flexibilidad para huéspedes o familia numerosa.
Contiguo a la casa principal se encuentra una casa de huéspedes independiente, perfecta para ofrecer privacidad adicional o como espacio para el personal.
Una chacra que ofrece lo mejor de la vida rural con el confort de una residencia bien equipada, ideal para quienes buscan un refugio tranquilo sin alejarse de las playas y la vida social de José Ignacio.
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